¿Y aquí quien coño trabaja?....

 El Gobierno inyecta este viernes a la banca más de 50.000 millones en capital. r-evolucion.es.

No inyecta nada. Cambia las reglas para que activos que ya tienen los bancos se puedan contabilizar como capital.

Otros 50.000 millones a pagar de nuestro bolsillo. ¿El próximo recorte cuál es? ¿Recortar en comida?.

¡Vayamos a manifestarnos al Congreso! ¡Ah! Espera. No tengo 300.000€ para ejercer mi derecho a manifestarme.

Bueno, al cambiar la ley les "inyecta" dinero.

Cambias una ley y aparecen 50000 millones de la nada. No sé si llorar o reír.

Los DTA son futuros créditos contra la Hacienda Pública. La realidad es que Basilea III no acepta este concepto y por ello es necesaria la garantía/aval del Estado.

Es decir, si un banco con créditos fiscales es insolvente, el Estado pondrá el capital que representan esos activos ("capital contingente"), lo que se denomina "monetización futurible" de los DTA.

En lugar de meter en la cárcel a consejos de administración enteros, siguen rodando la bola, a ver hasta dónde llega. A Mariano le van a votar los que están mejor que hace dos años: Bolinagas y otros violadores en serie, banqueros y mamporreros en general. Venga, Mariano, que lo estás bordando.

Joder Mariano, que jeta tienes, que les deberás para que te bajes los pantalones, y ahora a comprar deuda al 4% ellos pagan el 0,25% viva el vino.

Cincuenta mil millones, nuestros, ingresará el gobierno en Bankia, Sabadell, Santander y Caixabank, y también habrá de esa cantidad una pedrea para otras entidades.

Viva la pepa!

No ha sido suficiente pedir dinero a Europa, en nuestro nombre, para recapitalizar una banca saqueada por esta gentuza que nos gobierna alternativamente.

Aquí la mal llamada "crisis" debiera llamarse el gran atraco del poder financiero al pueblo español, atraco cometido con la ayuda necesaria e interesada de una clase política absolutamente enraizada con ese poder capitalista. Crecen imparables las grandes fortunas, aumenta el número de millonarios, y ya hay escondidos en Suiza los mismos miles de millones que han desaparecido en España.

El pueblo llano, la antigua clase media, la clase trabajadora, ha sido despojado de sus derechos más fundamentales hasta hacer de la Constitución una cínica relación de falsedades. Se ha empobrecido al país para generaciones y se le ha sumido en una dictadura oligárquica oscura, corrupta hasta los huesos, represiva y sin Justicia en la que el ciudadano juega un solo papel: el de víctima.

Bueno, pues ya tienen los bancos cincuenta mil millones de euros más para comprar deuda pública. ¿Y aquí quien coño trabaja?.

Si todo ese dineral, junto con el que ya se les dio, se hubiera dado a pymes en créditos blandos hubiera sido más productivo: no habrían cerrado tantas empresas, no habría tantos parados (con el consiguiente coste), la gente tendría un sueldo y podrían gastar elevando así la demanda interna, al elevar el consumo se mantendrían otras empresas. Siempre más positivo que echarlo en el pozo sin fondo que son los bancos.

Recuerdo mis años juveniles en los que el fútbol era nuestra mayor diversión, entusiasta, era ver una pelota de "goma" -que no balón- y los dos bandos eran inmediatamente elegidos, democráticamente, y ¡hala! a dar patadas.

Pero nuestro gozo en un pozo, el césped de nuestro estadio estaba lleno de piedras, charcos, baches y algún clavo suelto por allí, que se empeñaba en fastidiarnos pinchando la "pelota" y nos obligaba a realizar un tiempo muerto mientras nos las arreglábamos para remediar el pinchazo con un parche de goma, muy habitual en aquellos tiempos de la bicicleta como vehículo familiar.

Y así íbamos tirando y chutando y parcheando hasta que nuestro esférico decía basta y ya no había forma de poder arreglarlo, se nos acababan hasta los PARCHES.

Pues, eso me recuerda la BANCA, parches y más parches.

¡¡ Se acabará el partido algún día ??.

Cada mil años, o así, llega un personaje que deja España como un bebedero de patos. Ya deberíamos estar acostumbrados.

Cada varios siglos, no hay reglas fijas en los designios de la Divina Providencia, el destino envía hombres que tratan de enderezar el asunto: Alfonso VIII, Fernando el Católico, Paco el de Ferrol...

Creo que faltan dos siglos o tres para encontrar al que nos saque del hoyo.